Una ciudad es un espacio complejo, en constante cambio y movimiento. Es un territorio que aglutina a una gran cantidad de personas, culturas y leyendas. Pero ¿cómo es la Ciudad de Buenos Aires? ¿Cómo es nuestra Comuna? ¿Cómo se vive en ella? ¿Qué podemos observar? El barrio de nuestra escuela forma parte de la Comuna 11 y es un lugar lleno de historias y encanto. Por eso, salimos a recorrerlo.

Nuestro paseo comenzó en la puerta de la escuela y fuimos caminando por la Avenida Nazca hasta llegar al edificio del Nivel Secundario. Seguimos por la calle Tinogasta, observando construcciones muy antiguas que se contraponen a otras muy modernas y llegamos a El Antojo: un bodegón muy reconocido en la Ciudad de Buenos Aires. Transitamos también por la calle Cuenca y nos encontramos con un gran centro comercial y con muchas personas caminando.
Nuestra caminata nos llevó hasta una encrucijada de tres calles: Tinogasta, Campana y Ricardo Gutiérrez. Ahí estaba el misterioso Palacio de los Bichos, gran protagonista de una antigua leyenda local que intrigó a generaciones y generaciones. Los niños y las niñas reconocieron cada parte del palacio mientras compartían la historia sobre este lugar. Aunque no encontramos el edificio como lo habíamos visto en las fotos antiguas, no deja de ser un testimonio de la arquitectura de época que adorna nuestro barrio.


Continuando con nuestro recorrido, nos detuvimos para observar las numerosas líneas de colectivos que cruzan nuestras calles. Fue fascinante para ellas y ellos ver cómo el transporte que antes habíamos estudiado en nuestras clases ahora lo observábamos conectando a nuestra comuna con el resto de la ciudad. Además, pudimos visitar el ferrocarril San Martín en plena acción, con sus trenes pasando por la estación local. Este recuerdo del pasado ferroviario de Villa del Parque nos hizo apreciar aún más la historia que rodea a nuestra comuna.
Finalmente, necesitábamos recargar energías después de tanto explorar, así que nos dirigimos al hermoso bar Estación Jardín. Este pintoresco café nos brindó un cálido refugio para disfrutar de un delicioso desayuno. Las chicas y los chicas se deleitaron con las medialunas y el aroma del café con leche recién hecho mientras charlaban emocionados sobre lo que habían visto y experimentado en nuestro paseo.
Esta salida por Villa del Parque no solo fue una oportunidad para explorar nuestro barrio, sino también para fortalecer todos los contenidos adquiridos en el aula y crear vivencias especiales en cada una y cada uno. Descubrimos la belleza de nuestras calles principales, revivimos leyendas locales y nos maravillamos con el funcionamiento de nuestro sistema de transporte. Sin dudas, este paseo fue muy importante para dar forma a una gran exploración entre el aula y la experimentación con la realidad.